Job



Job 23


Entonces respondió Job y dijo:

Tweet thisPost on Facebook

--Hoy también es amarga mi queja; su mano se ha hecho pesada sobre mi gemido.


¡Oh, si yo pudiera saber dónde hallar a Dios! Entonces iría hasta su morada.

Tweet thisPost on Facebook

Expondría delante de él mi causa, y llenaría mi boca de argumentos.


Yo sabría las palabras que él me respondería; y entendería lo que él me dijera.

Tweet thisPost on Facebook

¿Contendería conmigo con la grandeza de su fuerza? No; más bien, él me prestaría atención.


Allí el justo podría argüir con él, y yo me libraría para siempre de mi Juez.

Tweet thisPost on Facebook

Si voy al oriente, él no está allí; y si voy al occidente, no lo percibo.


Cuando él actúa en el norte, no lo diviso; se vuelve al sur, pero no lo veo.

Tweet thisPost on Facebook

Sin embargo, él conoce el camino en que ando; cuando él me haya probado, saldré como oro.


Mis pies han seguido fielmente sus huellas; he guardado su camino y no me he apartado.


No me he apartado del mandamiento de sus labios; en mi seno he guardado los dichos de su boca.

Tweet thisPost on Facebook

Pero él es Unico; ¿quién le hará desistir? Lo que su alma desea, él lo hace.


Ciertamente él completará lo que ha determinado acerca de mí, y tiene en mente muchas cosas semejantes.


Por lo cual yo me turbo en su presencia; lo considero, y tengo miedo de él.


Pero Dios ha debilitado mi valor; el Todopoderoso me ha aterrado.


Sin embargo, no he sido silenciado por las tinieblas, ni porque me haya cubierto la oscuridad.







This goes to iframe